sábado, mayo 4

La gran enfermedad cuyo primer síntoma es el dolor en los dedos

No existe ningún examen ni síntoma que por sí solo confirme esta enfermedad pero sí existen varias alternativas para su tratamiento. En la nota, los detalles.

Es una enfermedad muy molesta, que cambia rotundamente la calidad de vida de una persona y que puede durar muchos años. Quien lo padece recibe punzadas de dolor en distintas parte del cuerpo -sobre todo en las zonas con más movimiento- y que no afecta en nada la capacidad mental de una persona. A lo largo de los años la medicina ha ido avanzando para convertirla en una enfermedad más llevadera, por lo que siempre es bueno conocer los primeros síntomas para lograr detectarla a tiempo y así aprovechar lo que hoy por hoy se puede hacer desde las ciencias médicas.

El dolor en las articulaciones de los dedos de las manos es el síntoma inicial típico de la artritis reumatoide. No existe ningún examen ni síntoma que por sí solo confirme  El dolor y la rigidez en las articulaciones generalmente empieza en las manos y en los pies, afectando ambos lados del cuerpo. Y este diagnóstico podría aumentar lentamente en el transcurso de pocas semanas. Sin embargo hay casos en que los síntomas se presentan rápido, casi de un día para el otro. La enfermedad también se empieza a manifestar en los hombros, codos, rodillas, caderas, mandíbula y cuello se ven afectados.

Qué es la artritis reumatoide y qué soluciones aporta la medicina

No existe cura para la artritis reumatoide, pero la mayoría de gente logra controlar la enfermedad y lleva una vida activa. Durante la última década, el tratamiento se ha vuelto más diligente y agresivo.  Normalmente se empieza con una combinación de medicamentos para mantener bajo control a la enfermedad lo antes posible. ¿De qué se trata? Se manifiesta cuando el sistema inmunológico ataca el revestimiento de las articulaciones (sinovio), que se inflama, produciendo dolor con el movimiento. Esa inflamación hace que el sistema inmune trabaje aún más, derivando en mayor hinchazón e inflamación. Si no se administra un tratamiento para interrumpir ese ciclo, la artritis reumatoide termina por causar daños y deformidades en las articulaciones, además de restringir la capacidad de la persona de utilizar las articulaciones afectada.

La artritis reumatoide ocurre cuando sistema inmunitario ataca por error los tejidos del cuerpo: afecta el revestimiento de las articulaciones (membrana synovial) y causa una dolorosa hinchazón que puede finalmente causar la erosión ósea y la deformidad de las articulaciones.Imagen: mayoclinic.org

Tratamiento de la enfermedad: opciones

  • Cortisona oral: disminuye rápida y eficazmente la inflamación de las articulaciones y puede administrarse durante un período corto. También la cortisona (conocida como esteroides o prednisona) se puede inyectar en las articulaciones, incluso en las de los dedos de las manos. .
  • Fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad (FARME): medicamentos como hidroxicloroquina (Plaquenil) y el metotrexato (Rheumatrex, Trexall) se proponen detener el avance de la artritis reumatoide y además salvar a las articulaciones y otros tejidos de daños permanentes.
  • Inhibidores del factor de necrosis tumoral alfa (FNT):  se encuentran en fármacos como infliximab (Remicade) y el etanercept (Enbrel) y es una proteína producida por los glóbulos blancos que activa el sistema inmune.
  • Además de los medicamentos existen muchas alternativas capaces de aliviar los síntomas de inmediato y de controlar la enfermedad a largo plazo.

En lo personal he tenido un familiar cercano que padeció esta enfermedad desde 1974 hasta su muerte en 1996. Aún no existían tratamientos para reducir los dolores, sin embargo esta persona pudo llevar una vida normal, que fue disminuyendo a medida que avanzaba la enfermedad. Aún así durante muchos autos pudo conducir el automóvil (inclusive haciendo viajes de más de 1300 kilómetros), realizar actividades sociales como visitar familiares, ir cada domingo a misa, todos los días salir a caminar con el perro e inclusive, administrar un club de jubilados. Y por otra parte, gracias a su máquina de escribir, se propuso escribir un libro que casi logró realizarlo. Este apunte de mi vida lo comparto porque esta persona, con su enfermedad, mantuvo su entereza y sabiduría, fue un referente y modelo de persona para muchos, sostener económica y moralmente a su familia, todo esto en el contexto de una época en que la medicina aún no había avanzado lo suficiente para  hacer llevadera esta enfermedad, que si bien no afecta en lo mental sí exige una fortaleza psíquica y humana para llevar una cruz (que no se ve pero sí se nota en el hombro quien lo lleva) hasta el final de su recorrido.

  • Un fármaco contra la artritis también es beneficioso para tratar la depresión

Lo importante, como sucede con todas las enfermedades, es identificar a tiempo los primeros síntomas y recurrir a la medicina, que hoy en día -a pesar de que no exista la cura- puede aportar mucho. Fuente: vidaysalud.com