Las personas deberíamos comenzar a tomar conciencia de la importancia de realizar ciertos cambios a medida que se acerca la vejez; son hábitos que pueden mejorar la calidad y esperanza de vida
La vejez es una de las etapas de la vida en la que más cambios se producen a nivel corporal. Esto no solo puede repercutir en la salud sino también en la manera en que nos relacionamos con las demás personas y cómo nos desenvolvemos en nuestra rutina diaria.
El Instituto Mayo Clinic señala que en la vejez el cambio más común se da en el sistema cardiovascular por la rigidez de los vasos sanguíneos y las arterias, lo que hace que el corazón se esfuerce más para bombear sangre a través de ellos. Estos cambios, solo por nombrar algunos, aumentan el riesgo de presión arterial alta y otros problemas cardiovasculares.
Hábitos saludables para la vejez
Es en este marco, cuando se pone al mismo nivel la vejez y la salud emocional y física, que las personas deberíamos comenzar a tomar conciencia de la importancia de realizar ciertos cambios en nuestra vida. El objetivo será siempre lograr una óptima calidad de vida que, como señala el doctor Agustín Salazar, geriatra de la Clínica Universidad de los Andes (Chile), se logra con herramientas para mantenerse sanos y un entorno seguro para poder mantener activa su vida.
Al respecto, es que los especialistas de la Clínica Universidad de los Andes ofrecen una serie de recomendaciones o consejos que las personas deberíamos tomar en cuenta si buscamos llegar a una vejez saludable. Se trata de hábitos que cubren diferentes necesidades de cualquier ser humano.
A continuación, destacamos 10 de los consejos que los profesionales comparten para lograr vivir una vejez con salud y con hábitos positivos para el bienestar físico y emocional.
- Realizar actividad física: mantenerse activos ayuda a cuidar de la salud física y mental, además de garantizar autonomía. También es necesaria porque colabora en la prevención de la ansiedad, demencia, cáncer de colon, depresión, enfermedades cardiovasculares y diabetes.
- Interacción social: la relación con personas de su entorno como amigos o familiares, o nuevas personas por conocer, ayudan a mejor la estabilidad emocional.
- Alimentación balanceada: elegir alimentos con gran aporte de nutrientes y alejarse de aquellos que pueden traer problemas de salud es un hábito muy positivo. Los pescados, los huevos y los lácteos descremados y fortificados aparecen entre los más recomendados.
- Aprendizaje: mantener activo el cerebro al participar de cursos y capacitaciones es una gran inversión en salud.
- No fumar: este y cualquier tipo de vicio debe ser evitado para prevenir enfermedades y garantizar un organismo limpio.
- Consumo de alcohol: el consumo moderado o el consumo nulo es beneficioso para el cuerpo. Evita ciertas enfermedades y accidentes.
- Dormir bien: principalmente en la noche, el buen descanso es necesario para cuidar del cuerpo y la mente. Dormir entre 7 y 8 horas diarias contrarresta síntomas de ansiedad y estrés, y disminuye la posibilidad de tener sobrepeso.
- Mantener su peso: al controlar su alimentación y realizar ejercicio también cuida su peso corporal, previniendo así sufrir varias enfermedades y manteniendo la masa muscular.
- No automedicarse: siempre es recomendable la prescripción médica para evitar padecer cualquier efecto adverso.
- Vacunarse: es la forma más adecuada de proteger al organismo de virus e infecciones. Dosis contra tétanos, coronavirus, antineumocócica y antigripal son las más recomendadas.